Luz, color fuego, pólvora, alegría, calles llenas, terrazas
repletas, cervezas, vermús, vinos, aperitivos, tapas, platos compartidos,
amigos….vuelven las Hogueras y durante varios días la gastronomía será el perfecto
hilo conductor de muchos alicantinos durante sus queridas Hogueras, y serán los buenos profesionales de la
hostelería alicantina, los perfectos actores de una función inolvidable de
buenos sabores.
Y es especialmente durante estos días, cuando la hostelería
alicantina vive uno de sus más importantes momentos anuales. Son días de
trabajo intenso, de derroche de esfuerzo y pasiones en alegrar al comensal.
Los hosteleros y los restauradores de la ciudad de Alicante-
desde el restaurante más reconocido o famoso, desde la cervecería de debajo de
nuestro hogar, desde el bar de barrio casi centenario o desde la pequeña bodega
en la que tomar ese perfecto vermú casero- hacen que la hostelería se convierte
en fiesta y la fiesta en trabajo recompensado. Sin duda, una unión perfecta.
Las Hogueras vuelven a la ciudad de Alicante con todo su
esplendor. Los cinco sentidos se despiertan del sueño invernal y renacen
pletóricos llenos de buen ánimo, de enorme disposición a la alegría y a la
felicidad en la búsqueda de la diversión de intensos días llenos de agradables
sensaciones. La vista, el tacto, el oído, los aromas por doquier y, cómo no, el
gusto acompaña durante los intensos días de Hogueras descubriendo nuevas o
renovadas sensaciones en forma de deliciosas especialidades gastronómicas
típicas de las Hogueras y de nuestra rica y variada gastronomía alicantina
preparadas y servidas por los abnegados hosteleros y restauradores de nuestra
ciudad.
Es el producto cercano el verdadero protagonista de las
Hogueras. Son los sabores de siempre los que convierte la gastronomía en
tradición y esa tradición en vanguardia renovada por la inquietud de muchos de
nuestros hosteleros. La tradición manda pero cada vez más, en muchos
establecimientos de hostelería y restauración de la ciudad de Alicante, se ha
buscado darle nuevos bríos a la coca en tonyna, a las brevas convertidas en
caviar, al atún de sorra servido de mil formas como manjar excelso o a los
arroces de nuevos y varios conceptos, son nuevos platos que conviven a la perfección
con el clasicismo gastronómico fogueril. Bravo.
Pero sobre todo, la Hosteleria vive durante las Hogueras una
autentica fiesta al ser los
restaurantes, los bares, las cervecerías, las heladerías, las barracas, los
racós o cualquier establecimiento de hostelería, el lugar perfecto para la
reunión de amigos, de familias, de los compañeros de las comisiones, de los
barraquers o de los innumerables turistas que eligen Alicante durante estos
días. Son estos establecimientos el punto de encuentro previo a las mascletás,
el lugar en el que reponer fuerzas tras los pasacalles o los desfiles, el
cobijo idel para el reposo tras la dura jornada fogueril o el espacio en el que
ver pasar la ilusión y la alegría que las Hogueras de Alicante derrochan.
Son días de enorme trabajo y además de una enorme
responsabilidad para nuestros hosteleros porque sin querer, se convierten en la
mejor imagen de nuestra ciudad. Su trabajo, su esfuerzo, su compromiso de lo
cercano y su implicación en la ciudad, les convierte a nuestros hosteleros y a
restauradores, en los mejores embajadores de Alicante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
ayúdame con tus comentarios